Mi metodología se basa en la práctica activa. Comenzamos cada clase con una breve conversación en inglés, donde los alumnos pueden practicar lo que han aprendido y ganar confianza. Utilizo juegos, canciones y actividades interactivas para hacer que el aprendizaje sea divertido y dinámico. Esto no solo ayuda a retener el vocabulario y las estructuras gramaticales, sino que también fomenta la participación.

El contenido de las clases está diseñado para ser práctico y relevante. Abordamos temas cotidianos como presentaciones, descripciones y situaciones comunes, lo que permite a los alumnos aplicar el inglés en su vida diaria. Además, adapto las lecciones a los intereses de cada estudiante, ya sea que les guste la música, el cine o los viajes.

Aunque soy nuevo en la enseñanza, tengo una gran pasión por el idioma y por ayudar a otros a aprender. Estoy comprometido a brindar apoyo constante y retroalimentación constructiva, asegurando que cada alumno progrese a su propio ritmo.

Si buscas una manera divertida y efectiva de aprender inglés, mis clases son perfectas para ti. ¡Te invito a unirte y descubrir lo emocionante que puede ser aprender un nuevo idioma!