En mis clases trato siempre de que cada estudiante identifique su forma de aprendizaje, además de potenciar las mismas en diferentes niveles y acciones que propicien un avance significativo en la materia.
Aunque utilizó diversas metodologías, según la forma de aprendizaje de cada alumno o alumna también soy consciente de que utilizo como parámetro la metodología Montessori, ya que los materiales concretos hacen más fácil la incorporación de conocimiento además de potenciar los nexos cognitivos en el cerebro.
Igualmente el perder el miedo y ayudar a que cada estudiante se mire con otros ojos es primordial, se parte de la idea de que simplemente ha sido una materia que aunque en cierta medida le es difícil, también hay que pensar en el punto en que sucedió esto. No darlo como una verdad absoluta sino encontrar la respuesta de cómo aprender mejor y de la forma de que comprenda las diversas áreas de las matemáticas.
En mis clases todo cuenta, hasta el estado de ánimo, es tan importante sentirse satisfecho y tranquilo porque asegura una predisposición más amena al conocimiento que se va a brindar, el avance es más evidente al tener una mejor recepción del estudiante.
En mis 15 años de docencia he encontrado grandes maestros a través de los niñ@s y jóvenes. Quienes me han enseñado que los diversos caminos que se pautan no aseguran un solo camino, aseguran diversas rutas para llegar a la meta. Por lo cual siempre trato de abarcar los temas desde referentes conocidos para cada estudiante.