Alan Tournour

Para la enseñanza de la historia presento los contenidos a trabajar, para luego resaltar la significancia de los mismos. ¿Para qué estudiar Historia, de qué nos sirve en la actualidad? Son dos preguntas que trato de tener presente para llegarle al alumno con un contenido que lo sienta significativo para su vida. Para leer el presente y quizás sacudir pensamientos antes abigarrados.
La Historia como disciplina nos promueve una visión más amplia ante la gran cantidad de información que llega a nuestros ojos, todo el tiempo. Mediante el estudio de experiencias previas podemos comparar problemáticas, analizar la búsqueda de soluciones y así comprender mejor no sólo "lo que está" ocurriendo, sino "lo que puede" ocurrir en el futuro. A su vez, el alumno se sentirá con mayores herramientas para plantear sus opiniones, sus críticas o sus consentimientos.
Es para destacar la promoción que hace de la disciplina Historia una materia fundamental para construir al alumno como un sujeto social, no carente de consciencia de su función en la sociedad y la relevancia política que implica su formación como ciudadano. Un individuo que conozca sus derechos es imprescindible para gozar de sus libertades. Más rico es quien conoce no solo los propios, sino los derechos que han sido, los que ya no están, los que se modificaron y también los que todavía faltan. En todo ello puede beneficiarnos el estudio de la Historia.
Por último, para quienes amen la disciplina como el profesor que les escribe, habrá lugar también "darnos una vuelta" por el pasado y disfrutar la estética, las costumbres, las anécdotas o los rituales de la Historia.